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  mantenimiento de la bruma  
   
     
 

La bruma de caña puede tener una larga vida ya que, al ser más gruesa, no está sometida a tanta tensión como la inxa (canyeta del grall).

Los cambios de humedad afectan su estabilidad. A veces un simple cambio de tiempo o de ambiente hace que la bruma "se cierre", o sea, que la lengua se quede pegada al tubo y no vibre. También puede pasar lo mismo si la caña no es suficientemente vieja o no haya sido bien secada.

Un remedio popular es ponerle un pelo, éste se coloca en la parte más estrecha y alta de la lengua (cerca del nudo). Es un remedio que no siempre da los resultados esperados.

 
     
   
   
   
         
   

Cuando se cierra la bruma, lo mejor que se puede hacer es estirarle la lengua varias veces (consultar el penúltimo paso de la construcción de la bruma).

Otra solución es torcer un poco la lengua con el fin de conseguir separarla un poco mas del tubo. Esta acción es un poco arriesgada, conviene ir con cuidado.

 
         
   

Si la bruma pierde demasiado aire por los costados se puede quitar el nudo de hilo y hacer uno nuevo un poco mas abajo, o sea, bajarlo más hacia el centro de la lengua.

Otra alternativa al nudo de hilo es poner un trozo de plástico (elástico) envolviendo en tubo.

Si está suficientemente estrecho hace la misma función que el hilo y es más fácil de mover.

Ir con cuidado a la hora de cambiar el nudo, no olvidemos que una lengua demasiado corta (o demasiado larga) afecta a la tonalidad y al sonido de la bruma.

 
         
   

Cuando una bruma es demasiado larga y no cabe dentro del agujero del braguer conviene cortar lo que le sobra.

Para volver a ponerla a punto, y conseguir que encaje dentro de la trompa, hay que proceder a rebajarle el grueso de las paredes en la parte del pie (pasos descritos anteriormente).

Como ya se ha dicho anteriormente, la tonalidad de la trompa no tienen porqué alterarse por la longitud de la bruma (no confundir con la longitud de la lengua), sinó que dicha tonalidad depende de la longitud y el diámetro de la trompa.

El hecho de recortarla tampoco debería afectar su sonido.

 
         
 

Si una bruma se vuelve negruzca con el paso del tiempo no quiere decir que pierda calidad sonora.

Los viejos xeremiers dicen que tanto la bruma como la canyeta (inxa), necesitan "adaptarse a la xeremía".

Cuando una bruma está bien temperada es mejor no tocarla demasiado, si la lengua se cierra un poco es mejor tener un poco de paciencia, posiblemente se compondrá cuando tenga su grado idoneo de humedad.

 
   
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